Eric Holder, el hombre que asesino al rapero Nipsey Hussle, fue sentenciado a al menos 60 años de prisión. El tiroteo ocurrió en marzo de 2019, afuera de una tienda de ropa que era propiedad de Hussle en el sur de Los Ángeles. Hussle tenía 33 años en el momento de su muerte y era una figura respetada en la comunidad del rap y en su comunidad local.
Holder se declaró inocente de los cargos de asesinato e intento de asesinato, pero fue declarado culpable en abril de 2021 tras un juicio que duró varias semanas. El juez condenó a Holder a 20 años a cadena perpetua por el cargo de asesinato, 15 años por intento de asesinato y 20 años por asalto con arma de fuego. Las penas se cumplirán concurrentemente.
La audiencia de sentencia incluyó declaraciones emocionales de la familia y amigos de Hussle, quienes hablaron sobre el impacto de su muerte y el legado que dejó. Holder también habló brevemente, ofreciendo sus condolencias a la familia de Hussle pero sin asumir la responsabilidad por el asesinato. El juez calificó el crimen de “particularmente cruel y depravado” y dijo que Holder no había mostrado remordimiento.
La sentencia de Holder significó un pequeño cierre para los seres queridos y fans de Hussle, quienes lloraron su pérdida y celebraron su vida y trabajo con distintos tributos.