El álbum “donde van los perros” marca un paso significativo en la carrera de ODD MAMI, quien se ha consolidado en la escena argentina como una voz fresca y profunda para su generación. Tras su debut en 2022 con “Mosaicos”, un disco que exploró las complejidades de las emociones juveniles y las relaciones personales, y su EP “Ultra” del 2023, donde comenzó a experimentar con sonidos más oscuros y catárticos, ODD MAMI regresa con un proyecto más maduro y reflexivo.
donde van los perros es un álbum de 11 canciones que se despliegan como fragmentos de una vida en plena transición. Cada tema está impregnado de un pop atmosférico y envolvente que lleva al oyente a un viaje introspectivo, invitándolo a cuestionarse sobre los recuerdos que elegimos guardar y aquellos que dejamos ir. Helena Massucco, conocida artísticamente como ODD MAMI, expone en este disco un lado más crudo y sutil, abandonando el autotune que caracterizó sus inicios y apostando por una interpretación más natural y suave, lo que contrasta con la intensidad emocional que recorre el álbum de principio a fin.
En esta nueva etapa, ODD MAMI se rodea de colaboradores excepcionales que enriquecen el sonido y la narrativa del disco. Destacan las colaboraciones de Dillom, su compañero en la RIPGANG, y de la cantautora mexicana Bratty, quienes aportan su propio estilo a temas que resuenan en una atmósfera de shoegaze, dream pop, grunge y folk. Además, Helena vuelve a trabajar con el productor Bernardo Ferrón, integrante de la banda cordobesa Telescopios, con quien ya había colaborado en “Ultra”. Juntos, construyen un lienzo sonoro que mezcla texturas desgastadas y acordes melancólicos, creando una atmósfera oscura y cinematográfica que refleja el universo emocional de la artista. Otros colaboradores incluyen a Juan López, Matías Vertula de El Club Audiovisual, Mariano di Cesare de Mi Amigo Invencible, y Santiago De Simone en la masterización del álbum.
La estética visual de donde van los perros también representa esta evolución. La portada, diseñada por Lucas Spataro y capturada por el fotógrafo Ignacio Chinchilla, muestra dos galgos en un terreno baldío bajo la oscuridad de la noche, una imagen que evoca calma y melancolía. En los videos que acompañan el disco, dirigidos por Juan Manuel Pinzón, no vemos a ODD MAMI, sino una serie de objetos y habitaciones vacías, representaciones visuales de recuerdos en proceso de desaparecer o ser destruidos. Esta propuesta se aleja de los colores vivos y la influencia de anime que antes caracterizaban a la artista, y en su lugar, introduce una estética oscura, con tonos desaturados y un estilo más desgastado y cinematográfico.
Con donde van los perros, ODD MAMI ofrece una carta de despedida a la inocencia y un testimonio de maduración artística. El álbum no solo consolida su lugar en la escena musical argentina, sino que también la reafirma como una narradora hábil de las transiciones y dilemas de su generación, creando un sonido y un mundo visual que invitan a la introspección y el autoconocimiento.