Hay canciones que nacen de una herida, y otras que se atreven a mirar esa herida con microscopio. “Limerence”, el nuevo sencillo del costarricense JODELO, es ambas cosas: una confesión y un estudio del amor obsesivo, de ese deseo que se confunde con devoción.
“Yo decidí dedicar una canción a mi ex, más que todo”, cuenta Andrew Olsen, mente detrás del proyecto. “Me observé a mí mismo y vi que mi forma de amor suele ser muy impulsiva, con las características de la limerencia.”
En esta entrega, JODELO se mueve entre la vulnerabilidad y la fuerza, buscando un balance emocional que termina por volverse catártico. “Mi música cuenta una historia. Empieza desde la apertura, desde uno abrirse como persona, y luego resuelve en empoderamiento personal”, explica.
Un sonido donde el metal se encuentra con la emoción
El sonido de Limerence no busca complacer, sino inquietar. Con tintes progresivos, metal y alternativos, la pieza canaliza la intensidad de influencias tan diversas como Devin Townsend, Knocked Loose y la escena dubstep y deathstep que marcó su adolescencia.
“Crecí escuchando desde guitarra clásica hasta deathstep. Mi sonido es una combinación de lo pesado y lo electrónico, de lo progresivo y lo emocional”, afirma Olsen.
El resultado es una canción que respira profundidad y técnica, una producción que él mismo grabó, mezcló y masterizó desde cero. “Fue la primera canción en la que mezclé los tambores completamente desde cero. El reto fue balancear el estéreo con las guitarras”, recuerda.
Entre la natación, los videojuegos y la música
Si algo distingue a Andrew es su mente competitiva. Campeón nacional de natación y jugador profesional de Overwatch, vive entre la disciplina del deporte y la libertad del arte.
“Para competir a esos niveles hay que mantener un buen balance. La música siempre fue una forma de liberarme de las emociones que sentía en la competencia”, explica. “Cuando estamos en niveles tan altos, las emociones pueden controlarte; la música me ayuda a mantener el control.”
Esa búsqueda de equilibrio se refleja también en su visión cinematográfica. Cada canción, dice, es un universo que puede expresarse de múltiples formas: desde videoclips hasta visualizaciones 3D. “Hay temas que no tienen que ser fotográficos, pueden ser una visualización o una idea renderizada”, comparte.
Una generación que transforma la frustración en arte
A sus 21 años, Olsen observa con lucidez el panorama de su generación. “Estamos tratando de entrar a una economía saturada, donde muchos pierden sus trabajos por la tecnología. Hay frustración, pero la música es donde expresamos esa injusticia.”
Esa pulsión generacional late con fuerza en Limerence, una canción que transita del caos a la calma, de la confusión a la claridad. Cuando le pedimos una palabra para describirla, no duda: “Nube”, dice. “Porque genera ese sentimiento de estar volando, de estar en paz, de estar fuera del cuerpo por esos cortos tres minutos.”
Lo que viene
Limerence no es un punto final. Es apenas una etapa más en el laboratorio sonoro de JODELO, quien ya prepara un nuevo sencillo. “El siguiente mes sale una canción de otro género totalmente. Paso del rock progresivo a algo más metal, más hardcore, incluso con rap potente”, adelanta.
Con este lanzamiento, JODELO reafirma su lugar dentro de una nueva generación de artistas latinoamericanos que encuentran en la autoproducción y la honestidad emocional su bandera.
“Limerence” ya está disponible en todas las plataformas digitales y su video oficial puede verse en YouTube.