El proyecto argentino se encuentra presentando MUDA, una obra integral de 10 canciones y una intro más que interesante.
HIJXS MALONES nace en 2017 como idea de Iván Kovacs (vocalista, compositor y guitarrista), quien convoca a Ariel Sebastia para tocar la batería dentro de una nueva formación; la cual se completa entre 2018 y 2019 con Valentín Silistria (guitarra), Clara Lambertucci (bajo) y Pedro Camerata (teclado/saxo).
La cuarentena despierta el lado creativo de la banda con una versión hogareña de “Huele a Capital” y se da la posibilidad de tocar en Camargo Casa Cultural a fines del 2020. También graba una Live Session de cuatro temas desde La Tangente.
El 2021 resulta propicio para firmar contrato con el sello Elefante en la Habitación! y estrenar el primer single, adelanto de su disco debut, bajo el nombre “Sol”.
Con la pandemia más controlada, el proyecto estrena el segundo sencillo “Arca Rosa” (2022) y despliega su repertorio en diferentes salas de concierto de la Ciudad de Buenos Aires.
Entre marzo y mayo de este año lanza los cortes “Sol2” y “Campamento”, junto a un videoclip autogestionado. Durante el mes de julio interviene en el ciclo “Semillero” del CC Konex y estrena el quinto single “Huele a Capital”.
Actualmente, la banda conformada por Iván Kovacs, Clara Lambertucci, Pedro Camerata, Gabriel Kerman (guitarra eléctrica) y Ariel Sebastia, disfruta del lanzamiento integral de su flamante álbum MUDA.
¿Cuáles son las raíces de Hijxs Malones?
Iván Kovacs – Quería hacer un disco medio pop, pero también raro y feo. Antes de empezar con este proyecto, tenía otra banda con la que hacíamos temas bastante extraños, al punto de que eran un poco difíciles de digerir. Así que arranqué Hijxs Malones para buscar un equilibrio entre lo pop y lo experimental. El primero que se sumó fue el baterista, Ariel Sebastia. Más tarde entraron Clara Lambertucci (bajo) y Pedro Camerata (teclados, saxo), y este año incorporamos a Gabriel Kerman para tocar la guitarra eléctrica.
¿Cómo nacieron las canciones que incluye “MUDA”?
La primera canción que compuse, unos cuatro años antes que las demás, fue “Cada vez que se abra mi Mente”. Después, la mayor parte de los temas los hice con la guitarra, tocando en la plaza. Muchas melodías me venían a la cabeza caminando por la calle y cuando llegaba a casa les sumaba los acordes, “Arca Rosa” es una de ellas. Para “La Razón” armé la base con un teclado Casio: en las teclas tocaba los acordes y con los pads iba creando la parte rítmica.
Respeto a las letras, creo que fueron una especie de autoayuda en ese momento. No estaba pasando mucho, me sentía bastante estancado y quería hacer varios cambios. Así que en estas canciones me puse a fantasear con un posible futuro. Ahora que lo pienso, pocos temas hablan del presente, la mayoría se refieren al pasado o al porvenir. Un disco que influenció mucho el sonido de estas canciones fue “Blackstar”, el último trabajo de David Bowie. Quise rescatar esos arreglos medio big band mezclados con electrónica.
¿Cuáles fueron los desafíos durante el proceso de grabación?
Fue un desafío importante el hecho de que varios músicos se fueron de la banda en la etapa de preproducción. Así que tuvimos que ponernos en multiinstrumentistas para cubrir los baches que habían dejado. Tampoco teníamos muy claro cómo alcanzar el sonido que estábamos buscando, pero se fue armando durante el proceso. Otra problemática, como de costumbre, era la del financiamiento: este es un proyecto independiente y autogestivo. Los mismos músicos ponemos los recursos para que la cosa avance, y eso a veces puede ser complicado.
¿Qué les destaca de otros artistas del género?
Nuestro fuerte está en la variedad y el contraste de las canciones entre sí, pero también cada tema internamente. Escuchamos mucha música de distintos géneros y nos gusta incorporarla a lo que hacemos. Otra virtud de esta banda es el sonido en vivo: creemos que el show es bastante potente y se puede sentir la energía arrolladora de las canciones más intensas.
¿Tienen algún referente musical mexicano con el que se identifiquen y/o que les gustaría compartir escenario?
Nos encanta lo que hacen artistas como Café Tacvba: todos sus discos son distintos entre sí, e incluso los temas de un mismo disco contrastan mucho. Por ejemplo, en “Re” hacen un corrido como “La Ingrata” y un par de temas después meten “El Baile y el Salón” que suena más a música disco.
¿Qué se viene para lo resta del 2023?
Ahora mismo estamos preparando la presentación en vivo de MUDA, que se va a hacer el 19 de octubre en Ciudad Cultural Konex. Tenemos muchísimas ganas de tocar y estamos armando toda una experiencia multisensorial para quienes se acerquen al evento. Después de eso nos gustaría armar shows en vivo por fuera de Buenos Aires, tal vez una pequeña gira, ¿por qué no? A fines del año pasado decíamos que este año íbamos a ir a tocar a México, así que, si nos invitan, encantados.
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