Drizzle estrena su primer disco y una carta de presentación que no se parece a nada. A sus 22 años, este cantante y productor mexicano se atreve a jugar con los géneros y llevarlos más allá: del reggaetón al drum and bass, con toques de música alternativa que lo alejan del molde y lo acercan a una nueva generación de artistas que no le temen al cambio.
El disco es un homenaje y una reinvención. Drizzle toma la esencia de los 2000 —sus sonidos, sus emociones, su estética— y la reinterpreta con una visión fresca, vulnerable y actual. Dosmil2 no busca encajar, sino marcar el inicio de algo distinto, algo propio.
En el corazón del álbum está “Gran Vía”, el focus track producido junto a VV Brujo. Una canción íntima que le canta a la nostalgia, la tristeza y la esperanza, pero sin caer en el drama. Es una rolita que te atrapa con su beat, te hace pensar, y al mismo tiempo te dan ganas de subirle el volumen y dejarte llevar.