Hablar de la música oscura en el Perú es inevitablemente mencionar a Carlos Compson. Este músico peruano ha sido un pilar en la escena independiente desde hace más de una década, construyendo un legado que se mueve entre el indie rock, el post-punk y el rock gótico. Su obra refleja una visión única de la vida, cargada de intensidad y profundidad emocional. A lo largo de su carrera, Compson ha sabido conectar con una audiencia que busca en su música algo más allá del simple entretenimiento.
Recientemente, ha vuelto a sorprender con el estreno del videoclip de “Sortilegios”, una canción que originalmente fue parte de su segundo álbum, Umbral, lanzado en 2013. Esta nueva versión se siente renovada, con arreglos que enriquecen su estructura original. Además, el videoclip tiene un toque especial, ya que fue grabado completamente en vivo, lo que le da una frescura y energía propia de las sesiones en directo. Compson, fiel a su estilo, invita a la introspección, sumergiendo al oyente en un viaje cargado de melancolía y reflexión.
A lo largo de su carrera, Compson ha demostrado ser un músico inquieto y comprometido. Su capacidad para explorar nuevos caminos sonoros lo mantiene siempre relevante. El lanzamiento de este videoclip no es solo un reencuentro con una de sus canciones más queridas, sino también una muestra de su continua evolución como artista. La versión en vivo de “Sortilegios” añade nuevas capas de sonido que invitan a descubrir detalles que tal vez pasaron desapercibidos en la versión de estudio.
El trabajo visual, dirigido por David Macedo, captura a la perfección la esencia enigmática y oscura de Carlos Compson. La intensidad de la grabación en vivo resalta con fuerza, especialmente con la incorporación de instrumentos como el chelo, que le da a la canción un aire aún más melancólico y profundo. Es una obra que refleja tanto el presente como el pasado del artista, una combinación entre la nostalgia y la reinvención constante.
Con este videoclip, Carlos Compson demuestra una vez más por qué sigue siendo uno de los referentes del rock alternativo peruano. Su música, lejos de envejecer, se sigue reinventando y encuentra nuevas formas de conectar con su audiencia. “Sortilegios” es una prueba de que la magia de una canción puede seguir viva años después de su lanzamiento, sobre todo cuando se tiene la capacidad de transformarla sin perder su esencia.
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