Con “500 Días”, su tercer sencillo, Dalí confirma que es una de las voces nuevas más emocionantes del pop mexicano. La artista —guapa, talentosa y con una presencia que captura al instante, entrega una rolita pop bailable pero con temática nostalgica que se siente como un abrazo triste pero necesario. Su sensibilidad y su estilo fresco hablan directo a una generación que vive las emociones con intensidad y sin filtros.
La canción profundiza en el desapego y el paso del tiempo después de una ruptura importante, pero lo hace desde un lugar honesto, suave y lleno de vulnerabilidad. Dalí canta con esa mezcla perfecta entre melancolía y elegancia, creando una atmósfera que duele bonito. Es el tipo de tema que escuchas una vez y ya te acompañó todo el día… y toda la memoria emocional que se activa con él.
Mi mayor deseo es que se sientan identificados. plasmando esa nostalgia que todos hemos pasado al finalizar una relación. No quiero que sea una canción para llorar, sino para sentir que no están solos en esa experiencia universal de dejar ir. Espero que haya un momento donde digan: ‘¡Claro, yo me sentí exactamente así!’ Si el tema logra darles esa sensación de liberación ese punto donde miras el pasado con cariño, pero sin dolor entonces habré cumplido mi misión.

El sonido de “500 Días” se vuelve aún más poderoso con la guitarra envolvente de Alex Carriedo y el bajo sentimental de Iván Velázquez, dos elementos que le dan textura indie sin perder su esencia pop. Bajo la producción de Óscar Calderón, la canción fluye con una estética moderna, limpia y emocionalmente cinematográfica, perfecta para quienes aman el pop que se siente real y que conecta.
Con este lanzamiento, Dalí no solo entrega una canción: afirma su identidad artística y su capacidad de transformar experiencias personales en himnos generacionales. “500 Días” es una invitación a sanar, a soltar y a reconocerse. Un recordatorio de que el pop también puede ser profundo, elegante y brutalmente honesto… justo como ella.
En el 2026 pretendo finalizar mi álbum, viene muchísima música y visuales. Seguiré madurando este hermoso proyecto para llegar a los corazones de la gente. Mucho trabajo y aprendizajes que permitirán entender más mi corazón y mi mente. Vienen más proyectos queriendo siempre crecer como artista y como persona.