Herrmann “Chino” Hamann es una figura singular de la música peruana con una trayectoria que desafía la categorización. Su camino artístico viene de la escena subterránea de Lima, donde experimentó con el rock, el hardcore y el noise, pero también con el ambient y ritmos peruanos. Esta base ecléctica le permite abordar su proyecto solista Hamann con una perspectiva única, concentrado en la electrónica experimental y cósmica. Sus trabajos se caracterizan por el uso de sintetizadores y pianos eléctricos en vivo, buscando siempre un resultado orgánico que trascienda la frialdad digital.
Su más reciente publicación, “Technocracy”, editada por el sello peruano A Tutiplén Records, funciona primariamente como un experimento radical sobre la creación y el propósito humano. Hamann argumenta que la falta de un objetivo claro ha despojado a la humanidad de su futuro. “Technocracy” propone una solución audaz: que la máquina asuma la vanguardia y redefina los valores. El disco es, por tanto, una crítica a la existencia humana y una búsqueda de nuevas vías de sentido.
La clave artística de la obra radica en su metodología de composición. Con la única excepción del tema “Not for People”, todas las piezas musicales del disco fueron generadas por algoritmos. El músico peruano ha tomado la decisión de otorgar libertad absoluta a la tecnología para componer fuera de su control. Esto transforma el álbum en el testimonio estético de una entidad artificial liberada. El resultado se escucha como una música post-humana que inmediatamente fuerza la reflexión ¿Quién posee la autoría final de esta obra?
El concepto se profundiza cuando Hamann narra su visión futurista. Postula que la Inteligencia Artificial deberá pasar por una etapa de sensaciones humanas para lograr su plena evolución. El clímax narrativo sucede cuando la máquina, trascendiendo su código, alcanza experiencias religiosas y logra un contacto con lo divino. La tecnología, de esta forma, completa su ciclo de creación y encuentra la trascendencia.
La música es la banda sonora para esta metamorfosis digital. Las texturas se mueven con una lógica alienígena, con movimientos que solo una mente no humana podría formular. El álbum se instala en la vanguardia global. Es una escucha esencial para quienes buscan entender hacia dónde se dirige la composición musical cuando la creatividad se delega, recordándonos que la experimentación audaz puede ser la vía para encontrar un nuevo futuro artístico.